A estas alturas, es raro que alguien no sepa qué es el “Ice Bucket Challenge” (desafío del cubo de hielo). Ya lo hicieron George Bush, Bill Gates, Mark Zuckerberg, Lionel Messi y Shakira entre muchos otros. Ya surgieron voces críticas como la de Chalie Sheen quién aceptó el reto a su manera tirándose billetes encima y no hielos, argumentando que los hielos se derriten y el dinero ayuda.
Los críticos más severos argumentaron que algunos participantes han gastado más dinero en hielo que en donaciones y que son inconscientes respecto al desperdicio de agua. El hecho es que lo que comenzó hace apenas unas semanas en Boston, Massachusetts como una idea para concientizar sobre la Esclerosis lateral Amiotrofia (ELA) y generar recursos extra para apoyar su investigación de la mano con la Asociación ALS, ha recaudado cerca de 100 millones de dólares hasta el momento. En días recientes, incluso Stephen Hawking quien padece la enfermedad se unió al reto.
La idea que tuvieron Pete Frates, exjugador de béisbol en el Boston College, quien sufre la enfermedad y Corey Griffin, quién falleció ahogado hace un par de semanas (muy irónico), es simple en esencia, se trata de tirarse encima una cubeta de agua con hielo encima para experimentar un poco del dolor corporal que puede sentir una persona con ELA, retar a alguien más a hacerlo en un lapso de 24 horas, subir el video a redes sociales y donar 10 dólares. Si quien recibe el desafío decide no vaciarse el hielo, tiene como alternativa donar 100 dólares en lugar de 10.
Bill Gates vs. Mark Zuckerberg
Obviamente las redes sociales volvieron a hacer de las suyas, la viralización del asunto ha resultado extraordinaria y por ende el objetivo de recaudación de fondos superó las expectativas de sus creadores. La página en Facebook tiene ya 25,397 likes y en Twitter, el hashtag #IceBucketChallenge estuvo varios días como Trend Topic. En su página de Facebook, señalan que del 1 de junio al 17 de agosto se compartieron 2.8 millones de videos relacionados. El tema ha sido cubierto en casi todos los medios a nivel internacional y el número de búsquedas registradas en Google es de 185, 000,000 lo que es una suma exorbitante tomando en cuenta que la búsqueda para FIFA World Cup 2014 registró 237,000,000.
La participación ciudadana a través de plataformas como Twitter, Facebook y Youtube para apoyar “causas nobles” como el alto al fuego en la Franja de Gaza, frenar las políticas migratorias estadounidenses o el alto a la violencia del narcotráfico en México, por mencionar algunas, ha funcionado muy bien pero no han tenido el éxito del #IceBucketChallenge, por lo menos en los números, a nivel cualitativo desconocemos su impacto.
Ice Bucket Challenge
¿Pero, qué tiene esta campaña que no tengan las demás y por qué registra esas cifras exorbitantes? Creo que hay varios elementos claves a destacar, en primer lugar no es un tema político sino humanitario, involucró a actores con verdadero poder de influencia a nivel internacional, exhorta directamente a la participación y depende completamente de ella, invita a hacer algo divertido o “cool” que le puedes mostrar a los demás y genera una especie de cadena humana virtual cuya consigna es no romper.
Cómo toda campaña exitosa el #IceBucketChallenge también tiene sus fallas y cosas que se salieron de las manos. Según las voces en contra, es una campaña frívola que no repara ni un segundo en desperdicio del agua, de acuerdo con el Washington Post van 19 millones de litros perdidos, quizá es más agua la que desperdiciamos al ducharnos, sin embargo la imagen puede llegar a ser ofensiva por sí sola. Otro punto negativo es que muchas personas no se unen verdaderamente al reto, únicamente se tiran el agua encima y lo que es peor, siguen sin tener una idea clara de lo que es la Esclerosis Lateral Amiotrofia.
Ice Bucket Challenge
Lo anterior puso en evidencia que, puede llegar a ser mucho más fuerte la necesidad humana de “hacer estupideces” como han llamado al reto en redes sociales, que la necesidad de ayudar a otros, además de nuestra incapacidad como sociedad de darnos cuenta que intentamos solucionar un problema agudizando otro. Aunque nadie puede poner en duda que el #IceBucketChallenge sigue viento en popa a pesar de que ya pasó un mes del boom.
El reto de ahora en adelante es aprender de los aciertos y errores del #IceBucketChallenge para generar mucho más impacto en campañas vinculadas a causas nobles, las redes sociales pueden catapultar nuestras ideas a dimensiones inimaginables, pero hay que cuidar los mensajes que emitimos pues pueden resultar contraproducentes.
Si ustedes quieren unirse al reto, adelante, sólo no olviden hacer su donación, pueden tener más información al respecto en el siguiente enlace: http://www.fyadenmac.org/icebucketchallenge.html
Autor : Fernanda Ramírez
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